La patología degenerativa del hombro, o artrosis del hombro, es un trastorno que implica la degradación del cartílago articular de dicha articulación, lo que lleva a la pérdida del espacio articular. Esta afección puede ser primaria, es decir, de causa desconocida, o secundaria a traumatismos, enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide, cirugías previas, inestabilidad, necrosis de la cabeza humeral, entre otras. Una causa particularmente importante es la artrosis secundaria a roturas de manguito evolucionadas, conocida como artropatía de manguito rotador.
Sintomas de la Patología Degenerativa del Hombro
Entre los síntomas más comunes de la patología degenerativa del hombro se encuentra el dolor, que a veces puede aparecer en reposo, así como la rigidez con pérdida progresiva de movilidad, pérdida de fuerza y limitación para realizar actividades de la vida diaria. En casos muy avanzados los pacientes pueden notar inestabilidad y crepitación en la articulación.
Diagnostico de la Patología Degenerativa del Hombro
Para el diagnóstico de esta afección, se requiere una exploración física en la que se pueden encontrar signos como dolor, pérdida de rango normal de movilidad y chasquidos con la movilidad debido al roce directo de hueso con hueso. Además, es necesario realizar pruebas de imagen como radiografías simples, tomografía axial computerizada (TAC) o resonancia magnética nuclear (RMN) para evaluar el grado de desgaste y alteración ósea, así como el estado de las partes blandas, en especial la integridad del manguito rotador.
Tratamiento y Prevención de la Patología Degenerativa del Hombro
En cuanto al tratamiento, en los casos iniciales se puede probar con opciones conservadoras, como fisioterapia, tratamiento con antinflamatorios o las infiltraciones intraarticulares con corticoides o ácido hialurónico. Si estas alternativas fracasan, la opción más razonable para mejorar los dolores y la función del hombro es la cirugía. En los casos menos evolucionados se puede plantear una limpieza articular artroscópica, aunque en la mayoría de los casos se requiere una prótesis o artroplastia. En los casos de artrosis secundaria a una rotura crónica no reparable de manguito rotador, se puede considerar una prótesis invertida de hombro, una opción cuyo uso se está generalizando y que logra una mejora significativa del dolor y la movilidad.
